Bálsamo corporal nutritivo de mango

El mango nutre la piel y el cabello. Recomendado para modelar, el mango devuelve suavidad y flexibilidad al tiempo que perfuma la piel con notas dulces y exóticas.

Famoso desde la antigüedad, el aceite de almendras dulces, rico en ácido oleico, es conocido desde hace mucho tiempo por sus propiedades dermatológicas. Contiene vitamina D que promueve la reparación celular. El aceite de almendras dulces nutre generosamente la piel, la suaviza y tonifica. También se sabe que ayuda a prevenir las estrías. Emoliente, alivia los problemas de la piel (eczemas, quemaduras solares, picor, quemaduras, etc.)

Originario de África tropical, el aceite de ricino proviene de la planta del mismo nombre, el ricino. Si bien el ricino no se puede comer, el aceite vegetal que se extrae de él tiene muchas propiedades beneficiosas para nuestra piel. Muy rico en ácidos grasos y vitamina E, el aceite de ricino ayuda a hidratar y nutrir profundamente la piel al rellenar suavemente la dermis: ideal para piel seca. El aceite de ricino, obtenido por prensado en frío, se caracteriza por una viscosidad muy alta (es el aceite vegetal más denso). Su ácido graso específico, el ácido ricinoleico, hace de este aceite un tratamiento de belleza con asombrosas virtudes ya conocidas desde la Antigüedad desde que Cleopatra lo utilizó.

Combinado con la técnica de masaje de su elección, nuestro bálsamo es ideal para tratamientos de afusión o en seco. Toma un poco de bálsamo, trabájalo hasta obtener una textura que se derrita. Aplicar sobre la piel y masajear con la técnica de su elección.

Todo tipo de pieles.